By Después de pasar los peores meses y con más de 60.000 personas que la utilizaron, el Gobierno de la Ciudad está de a poco desmantelando la rede de hoteles y centros de alojamiento pacientes leves y asintomáticos de Covid-19, un indicio más del camino que está transitando la enfermedad en el distrito.
De los más de 50 hoteles disponibles, con 4850 camas, solo 20 quedan en funcionamiento, los de mayor capacidad y cantidad de habitaciones. El resto, los más pequeños, se encuentran en reserva por si en los próximos meses deben ser utilizados nuevamente.
Lo mismo está ocurriendo con el centro de aislamiento que en mayo pasado comenzó a funcionar en los pabellones de Costa Salguero, un espacio para 800 personas, de 16.000 metros cuadrados acondicionados con todos los servicios básicos de contención y recreación, también para pacientes leves y asintomáticos. El 2 pasado las últimas tres personas alojadas allí recibieron el alta y las instalaciones se están desarmando.
En abril, cuando se creó el sistema de contención, los hoteles eran 11 y solo albergaban a los argentinos que llegaban del exterior, de zonas con circulación comunitaria del virus, y necesitaban hacer la cuarentena.
Desde mayo también los hoteles le dieron apoyo al sistema sanitario para alojar los casos leves que no requerían internación general ni de alta complejidad. En junio, la demanda obligó a cuadriplicar la disponibilidad y tiempo después a sumar nuevos establecimientos para hacerle frente al pico de contagios.
