El caso del jubilado de 71 años que sufrió tres robos consecutivos en la madrugada del sábado, durante los cuales lo golpearon y torturaron con destornilladores, y terminó matando de un balazo en el tórax a uno de sus cinco atacantes, cada vez reúne más simpatizantes.
El hecho ocurrió el viernes pasado por la noche, cuando un grupo de asaltantes ingresó a la casa de Ríos, en Quilmes. Tras el asalto, casi todo el grupo logró escapar excepto Franco Martín Moreyra, de 26 años, a quien Ríos disparó en el tórax cuando se retiraba, ya herido, de la vivienda.
Ahora, un grupo de personas inició una petición colectiva en la plataforma change.org bajo la consigna «Justicia y liberación de Jorge Ríos» que ya reunió 120 mil firmas. «Sigue detenido por el hecho de haberse defendido de 3 delincuentes que entraron a su casa a la noche. Esta persona no solo es grupo de riesgo por su edad en esta situación de pandemia, sino que además tiene problemas coronarios y de EPOC», detallan en el sitio.
«Te pido que firmes para exigir justicia y la liberación inmediata de este jubilado mientras la fiscalía investiga el caso», sostiene el petitorio. «No puede ser que se libere a personas detenidas por delitos gravísimos y encerremos a un jubilado que trato de defenderse».
Mientras el fiscal aguarda el resultado de la autopsia, así como también el informe de la Policía Científica, entre otras pericias, los investigadores pudieron reconstruir lo que sucedió el viernes pasado en la casa de Ríos: el análisis de las imágenes de dos cámaras de seguridad reveló que los cinco delincuentes ingresaron minutos antes de las 5 de la madrugada a la vivienda de Ríos, ubicada en la calle Ayolas al 2700 de la localidad de Quilmes Oeste, luego de trepar la medianera de un vecino para llegar al fondo de la propiedad.
El jubilado fue sorprendido mientras dormía por los asaltantes y fue golpeado e intimidado con un destornillador, mientras le exigían dinero. En esas circunstancias, Ríos extrajo una pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros de su propiedad y les efectuó al menos seis disparos a los delincuentes, quienes huyeron de inmediato, según explicaron a Télam fuentes de la investigación.
Dos de los ladrones quedaron registrados por las cámaras mientras huían, mientras que un minuto después se observa al último de los delincuentes, Moreyra, quien escapa rengueando y luego de doblar la esquina, ya a unos 60 metros de la vivienda del jubilado, se sienta en el suelo.
Siempre según la misma secuencia, el ladrón se encontraba desarmado cuando se ve a Ríos portando un arma de fuego en la calle y se acerca a Moreyra. Luego se ve al jubilado que forcejea con el asaltante hasta que este deja de moverse, informaron fuentes de la investigación.
Esto les permite inferir a los investigadores que fue el momento en el cual el jubilado le disparó en el tórax, ya que de las imágenes se desprende que Moreyra no tenía previamente una herida en el pecho por la forma en que escapaba «a los saltos».
Además, en el momento de peritar la escena del crimen se hallaron tres vainas servidas de calibre 9 milímetros, que fueron levantadas para cotejarlas con la pistola que le secuestraron al imputado.
Ríos fue aprehendido luego de un allanamiento en urgencia que se realizó en su casa dispuesto por el fiscal Rivas, quien en principio ordenó su aprehensión por el delito de «homicidio con exceso en la legítima defensa» y luego agravó su acusación.
El jubilado fue asistido por personal de salud, que constató heridas sangrantes en su cabeza y lesiones visibles en un antebrazo y el rostro.