Los jueces de la Corte Suprema de Justicia rechazaron otorgarle una licencia al juez federal, Ariel Lijo, de su cargo al frente del tribunal federal Nro. 4 de Comodoro Py, para que pueda asumir como miembro del supremo tribunal, hasta que el Senado decida sobre su situación.
Con esta decisión, el magistrado no podrá ocupar el quinto cargo que le fue designado a través de un decreto, por el presidente Javier Milei, y que desató una fuerte polémica tanto en el ámbito político, como judicial, por los antecedentes de Lijo.
Los cortesanos Horacio Rosatti, Manuel García-Mansilla y Carlos Rosenkrantz se opusieron al pedido del juez federal en licencia. Mientras que Ricardo Lorenzetti votó en disidencia, a favor de la designación del magistrado en el máximo tribunal, en el primer encuentro entre los cuatro integrantes de la Corte.
Ya que la semana pasada García-Mansilla fue aceptado como cuarto miembro de la Corte, en reemplazo de Juan Carlos Maqueda, que se retiró en diciembre pasado, al cumplir el límite de edad de los 75 años. El constitucionalista, también fue designado por decreto por Milei, pero fue aceptado por el tribunal.
Desde el Gobierno hicieron una fuerte defensa de la designación de Lijo para la Corte, “Lijo es juez federal, tiene las condiciones de un juez. No solo eso. Es especialista en temas de narcotráfico y ciberdelito que no tenemos, los temas de terrorismo, que es un tema muy complicado, y es respetado por sus pares”, dijo Milei.
“Casación no le revocó ninguno de sus fallos. No solo eso, sino que además cuando le dicen: ‘No, que duerme las causas’. ¿Cuánto tardan las causas? ¿O son solo la del Lijo? El único político estrictamente político que fue preso, ¿quién fue? (El exvicepresidenta de Cristina Kirchner), Amado Boudou. ¿Y quién lo metió preso?”, agregó el mandatario nacional.