By La jueza federal María Romilda Servini de Cubría intervino este martes el PJ nacional y designó como interventor al líder de los gastronómicos, Luis Barrionuevo.
Desde el peronismo, reunido en Gualeguaychú bajo el liderazgo del senador Miguel Angel Pichetto, acusaron a la jueza de favorecer a Casa Rosada.
La decisión se conoció hoy a través de un fallo, que establece que Barrionuevo «desempeñará funciones» como interventor hasta que se normalice el partido y «tendrá como misión producir los actos necesarios» para avanzar hacia esa normalización.
La resolución de Servini dispone, además, que Barrionuevo deberá «realizar un inventario de bienes muebles e inmuebles» del PJ nacional, e «informar sobre la situación económico financiera» del partido.
José Luis Gioja anticipó que apelará el fallo judicial, y cuestionó la «judicialización de la política». Además, describió la medida de Servini como «una intromisión» en la vida del partido y argumentó que el partido «está normalizado».
«No me cae como un balde de agua fría, porque siempre hay personas que quieren que el justicialismo tenga un tropiezo», admitió Gioja.
Servini hizo lugar a una medida cautelar presentada por Carlos Acuña, jefe del gremio de trabajadores de estaciones de servicio y legislador bonaerense del Frente Renovador de Sergio Massa , y de Oscar Rojas, líder del sindicato de obreros de maestranza. Ambos están enrolados en la CGT Azul y Blanca que conduce Barrionuevo, que habían solicitado que se declare «el estado de acefalía» del PJ nacional.
