By Lejos de un estado de alarma o preocupación, mientras en las redes se replicaban sus dichos sobre brasileros y mexicanos frente al presidente español, lo que llevó a múltiples burlas de los países vecinos y una explosión de memes en las redes, Alberto Fernández almorzó tranquilo con una joven artista plástica mendocina a la que le dio una visita guiada personalizada por la pinacoteca de la Casa Rosada.
Florencia Aise, de 37 años, reveló este fin de semana que mantuvo su encuentro con el presidente Alberto Fernández, el viernes pasado, que luego compartió en sus redes sociales.
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“Fueron más de dos horas. No nos conocíamos personalmente pero veníamos hablando por whatsapp desde hace varios meses. El Presidente recibió un cuadro mío en su visita a Mendoza durante la Vendimia (el 6 de marzo) y esa misma noche me escribió para agradecerme”, le contó a Clarín.
La pintora del hiperrealismo, que trabaja con imágenes que muestran su esencia ligada a la naturaleza, las uvas, el vino, y sus dos hijas como inspiración, logró que el mandatario conozca y elogie su obra.
«El honorable Presidente de la Nación Argentina me invitó a ser parte del ingreso artístico argentino-mendocino al mundo. Vamos a llevar a nuestras obras por el mundo y mostrar a nuestra preciosa Mendoza, como siempre lo hicimos, y fue siempre gracias al apoyo de ustedes«, posteó Aise en su cuenta de Instagram junto a una foto donde está sentada en el sillón de Rivadavia, en el asiento presidencial y, a su lado, de pie, posa Alberto Fernández. “El me ofreció sentarme en su sillón. La foto la tomó Ana, la secretaria privada del Presidente”, explicó.
Aise es diseñadora industrial, especializada en gráfica, egresada de la Universidad Nacional de Cuyo. Lleva 20 años de carrera como pintora. Ha expuesto en galerías de arte de Nueva York, Miami, México, Barcelona y Roma. En julio su obra será exhibida en la feria de arte Arco Madrid.
Tiene dos hijas, ha viajado mucho y vivido en Miami, donde consolidó su carrera. Dice que no le interesa la política y que nunca había ido a la Casa Rosada, hasta que su vida se cruzó con la del Presidente.
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En la última Fiesta de la Vendimia, el gobernador de Mendoza le obsequió a Alberto Fernández una pintura de Florencia Aise. Es un cuadro de 35 x 30 realizado en óleo y plata sobre lienzo, que reproduce de modo hiperrealista un racimo de uva Malbec. El presidente conoció en un posteo de la artista a quién había realizado la obra y le escribió. Desde entonces la artista mendocina y el presidente siguieron hablando por whatsapp.
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“Hasta cuando llegué a la Casa Rosada no sabía si me había escrito con él o con otra persona. Estaba esperando en la puerta porque no me dejaban entrar los guardias. De repente, vi el helicóptero descendiendo y ahí el presidente me respondió mi mensaje”, dice Aise.
A la pintora le costó ingresar. “Pasame con los policías”, cuenta que le dijo Fernández; pero los custodios de Casa Rosada no le creían a la mujer que aseguraba que era el propio Presidente el que iba a hablarles para autorizarla a entrar. No quisieron atenderle el teléfono. Al final, Fernández envió a uno de sus empleados a buscar a Florencia a la entrada. “Hasta que no lo vi en su despacho, no creía que iba a almorzar con Alberto”, admite la mujer.
¿De qué hablaron durante su reunión? «Al Presidente le interesa y sabe muchísimo de arte y me impactó. Fue muy caballero; ‘Es un placer encontrar gente como vos, sos sincera y más interesante de lo que creía’, me dijo. Hablamos mucho de la familia, los hijos, la historia con su padre… Y que lo más difícil es cuando ves que en algún momento los hijos tienen vida propia», reveló la joven a Clarín.
¿Cómo estaba de ánimo el Presidente tras el escándalo por su polémica frase? «Físicamente lo vi mejor, más distendido, mejor en persona que cuando lo veía en imágenes. Atendía algunos llamados pero se le notaba que estaba disfrutando mucho el momento que estábamos pasando. En la recorrida, me mostró un cuadro de la Conquista del Desierto y me comentó: ‘Este mismo cuadro le mostré al presidente de España’. Fue la única referencia a todo lo que había pasado», contó.
El encuentro duró más de dos horas. Pasadas las 16 del viernes la artista se retiró de Casa Rosada. Aise consultó si podía compartir en las redes las fotos de su visita, y obtuvo el consentimiento de Fernández. A partir de este acercamiento y su amistad con Fernández, la artista mendocina confía en que podrá avanzar en su proyecto de “difundir el arte argentino en el exterior y el de Mendoza, en el país”.
