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258 vuelos cancelados: más de 30.000 pasajeros fueron afectados por la intransigencia gremial

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Una medida de fuerza sin aviso previo de los gremios aeronáuticos paraliza desde las primeras horas de este jueves las operaciones de Aerolíneas Argentinas en el Aeroparque Jorge Newbery, en Ezeiza y en varios aeropuertos del interior del país.

En un principio los sindicatos aseguraron que a media mañana se normalizarían los servicios, pero sucedió todo lo contrario: comenzaron a sucederse las cancelaciones de vuelos y a las 14 ya se habían suspendido 153 operaciones.

Los gremios que tienen de rehenes a los pasajeros con una huelga desde las 7 de la mañana son los sindicatos de pilotos (APLA y UALA), el personal de tierra agrupado en la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), los técnicos de APTA y la Unión del Personal Superior (UPSA).

La excusa de la protesta es una reivindicación salarial pese a que la mayoría de los pilotos de la compañía tiene ingresos mensuales de 200 mil pesos.

«Aerolíneas Argentinas reitera su permanente vocación de diálogo con sus trabajadores. Sin embargo, el reclamo gremial no fue acompañado de un planteo formal a la compañía, lo que impide la posibilidad de conversar sobre las diferencias que pudieran plantearse», señalaron desde la compañía.

Desde Aerolíneas Argentinas informaron que están realizando «los mayores esfuerzos por reubicar a los pasajeros afectados en los vuelos más próximos a su programación original que sea posible».

Al mismo tiempo, la compañía aseguró que «los pasajeros afectados podrán cambiar sus pasajes por otras fechas o destinos durante un lapso de 30 días, a través de la misma vía por la cual los compraron».

Mientras miles de pasajeros se ven perjudicados, el presidente Mauricio Macri aprovechó un acto en Pilar, donde inaugurar un hotel de la cadena Hilton, para referirse a la aerolínea de bandera. «No es justo que el 95% de las personas que no usan aviones tengan que pagar para que Aerolíneas funcione».