By La Justicia dará a conocer el próximo jueves, los fundamentos de la sentencia por corrupción a la vicepresidenta Cristina Kirchner y al resto de los condenados en el juicio conocido como Vialidad.
A partir de ese momento se dará lugar a la etapa de apelaciones y el caso llegará a la Cámara de Casación Penal, en donde la defensa de la ex mandataria buscará por todos los medios desestimar las pruebas presentadas por los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola.
Luego de que los jueces del Tribunal Oral Federal 2 (TOF 2) integrado por Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso, darán a conocer los detalles de la condena a seis años de cárcel para la Vicepresidenta y de inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos.
Este último ítem ha sido el foco para que el kirchnerismo insista con la idea de “proscripción” contra su líder política, aunque no es impeditivo para que CFK se presente como candidata en las próximas elecciones, ya que la condena no está firme.
Sin embargo, la defensa de la vice de Alberto Fernandez, ya trabaja en la apelación de la condena, una estrategia que el abogado Carlos Beraldi maneja en estricta reserva y de la que solo están al tanto unos pocos dirigentes y funcionarios muy cercanos como el procurador del Tesoro, Carlos Zannini.
En ese sentido, Los abogados de la titular del Senado, intentarán demostrar que fue condenada con prueba indirecta, es decir, que el TOF 2 no logró hallar documento o testimonio que certifique que Cristina, fue quien dio la orden de asignar las obras públicas viales al empresario santacruceño Lázaro Báez.
Dicho de otro modo, que no tiene vínculo alguno con el delito de administración fraudulenta por el que fue condenada. Se espera que justamente ese sea una de las justificaciones de la defensa de la es mandataria para intentar derrumbar la acusación del fiscal y la condena.
