By El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, contestó este viernes a las chicanas que, durante el anuncio de la nueva cuarentena estricta de nueve días, lanzó el presidente Alberto Fernández contra la Ciudad de Buenos Aires.
Cuando le preguntaron si se había sentido aludido cuando el presidente dijo que en el país no podía haber 24 estrategias sanitarias diferentes, el ministro porteño respondió: «No hay espacio para que las personas nos pongamos delante, hay demasiado dolor como para poner el ego por delante de nada, no me siento aludido de nada. Escucho, trato de aprender de lo que escucho y reflexiono».
Quirós se refirió también a la estrategia común que planteó Nación para todo el territorio en la aplicación de las nuevas restricciones: «La estrategia de una acción colectiva es apropiada», dijo. Aunque aclaró que «en otros momentos no parecía apropiada», porque la pandemia afectaba de modo heterogéneo al país.
«Siempre defendimos la regionalización de las políticas, en este momento la realidad muestra que el escenario es homogéneo en todo el país» siguió el funcionario.
Para Quirós, en esta semana de aumento de contagios, lo que quedó en evidencia es que se ha ido perdiendo la capacidad de concentrarse en los cuidados, y eso significa que es necesario rápidamente contener la contagiosidad.
A su vez, sobre la suspensión de las clases en la Ciudad de la semana que viene, aclaró que se trata de un cambio de calendario que no implicará pérdida de días de escuela: «Estamos reprogramando el calendario escolar. Dado que hemos desarrollado un cierre muy estricto es que estamos acompañando con la reprogramación escolar, no estamos suspendiendo tres días de clases sino agregando tres días sobre el final de diciembre, moviendo el calendario tres días para adelante».
«Por los próximos diez días nos tenemos que cuidar. Es un esfuerzo muy intensivo», anticipó Quirós, y remarcó que la intención es «disminuir la tasa de contagio», y que eso debe ser acompañado por «15 días de una intensa vacunación».
«Los nueve días son para generar un corte en la transmisión. Al día de hoy hay una cantidad de porteños que están incubando la enfermedad y aún no lo saben. Sobre ese grupo que está incubando es sobre el que vamos a buscar quebrar la cadena de transmisión», explicó el ministro.
El ministro aseguró que al cortar la transmisión, la otra semana deberían comenzar «a aparecer números más bajos», e insistió: «Al mismo tiempo es necesario tener una campaña muy intensiva de vacunación».
La idea es que «cuando la cadena de contagiosidad se vuelva a retomar por el aumento de la circulación ciudadana, la mayoría de las personas vulnerables estén vacunadas», consignó Quirós.
