By Los derechos de la música de David Bowie finalmente fueron vendidos a la compañía por sus herederos, quienes recibieron la módica suma de 250 millones de dólares por todo concepto, luego de varios meses de negociaciones, según pudo conocerse a través de la publicación Variety.
La empresa discográfica Warner Chapell Music tendrá ahora a su cargo todo el catálogo del compositor, cantante y célebre showman, cuya intervención en la historia de la música moderna no tiene parangón.
La gran producción musical de Bowie abarca seis décadas y 27 discos de estudio, incluyendo el trabajo con la agrupación Tin Machine; también en la nómina están incluidos discos como «Space Oddity» (1969), «Let’s Dance» (1983), «Black Tie White Noise» (1993), «Blackstar«” (2016), además de la producción póstuma «Toy», publicada en noviembre de 2021.
La operación de venta fue dada a conocer de manera oficial por medio de un comunicado firmado por Guy Moot, copresidente y director ejecutivo de la compañía, a pocos días de cumplirse un nuevo aniversario del nacimiento de Bowie.
El vendaval de estrellas internacionales de la música que en el último tiempo decidieron desprenderse de los derechos de su trabajo también incluye a Tina Turner, Bob Dylan, Bruce Springsteen, Mötley Crüe, entre otros, y constituye a estas alturas un fenómeno más que significativo.
Es evidente que el cambio en los modos de consumir música generó también una modificación a la hora de pensar los contratos y la obtención de ingresos a futuro de parte de los artistas frente a las grandes empresas productoras.
